El mundo funerario en el área costera del noroeste peninsular durante la antigüedad

Resumo

El estudio de las prácticas funerarias de una sociedad es esencial para comprender, no solo la actitud que esta adoptaba ante la muerte de un miembro de la comunidad, sino también para conocer las creencias, prácticas y dinámicas, usos del espacio, gestión de los recursos e incluso intercambios de productos e ideas que eran llevadas a cabo por estas poblaciones. Su estudio se configura, por lo tanto, como una fuente de información de incalculable valor para el conocimiento del mundo antiguo, centrándose este trabajo en los vestigios funerarios localizados en la fachada atlántica del Noroeste peninsular. La ausencia de estudios de conjunto, así como la falta de catálogos o registros completos de los espacios funerarios identificados en esta región, han hecho necesario un acercamiento al tema en dos niveles: uno centrado en la distribución espacial de las necrópolis sobre el territorio, así como de otro tipo de restos funerarios identificados en el mismo, y otro centrado en cada uno de los espacios funerarios como caso de estudio individual, con especial incidencia en los conjuntos de la actual ciudad de Vigo. Se recopila información de un total de setenta espacios funerarios, distribuidos de forma desigual por el litoral gallego y asociados, principalmente, al periodo romano y tardorromano. La información recuperada sobre los mismos es dispar, con conjuntos ampliamente estudiados y otros de los que apenas se conservan datos, siendo necesaria por lo tanto la creación de una tipología de sepulturas propia para esta región, que permitiese incluir en el estudio todos los espacios funerarios, independientemente de la cantidad de información recuperada. Su análisis, desarrollado con la ayuda de las nuevas tecnologías y mediante la aplicación de las nuevas teorías sobre la materia, ha permitido obtener una visión general del mundo funerario del área costera del Noroeste peninsular durante la Antigüedad. Entre los resultados obtenidos, destaca la observación de patrones de localización para este tipo de espacios, reflejo de las dinámicas de asentamiento de las poblaciones a las que pertenecían los difuntos; la relación entre los espacios funerarios y otro tipo de vestigios o restos de funcionalidad diversa; la vinculación de estos espacios con el litoral y como la proximidad de la costa se refleja en el registro funerario; así como la llegada de gentes, ideas y productos foráneos, probablemente a través del mar, indicativo de la importancia de la vía marítima atlántica durante este periodo. Se identifican asimismo patrones de organización, distribución y ordenamiento internos para estos espacios, que hablan de una planificación intencionada de los mismos; el uso de tipos específicos de sepulturas, así como de elementos de ajuar, mortaja y ofrendas; y la adopción de las prácticas funerarias y métodos de disposición del cuerpo propios del mundo romano. Permitiendo asimismo establecer una cronología específica para este tipo de restos, propia de la fachada atlántica del Noroeste peninsular, incluyendo este territorio en el mapa general de Hispania y el Imperio romano durante la Antigüedad.