Cine, paisaje, pintura. Una mirada al audiovisual gallego contemporáneo

Resumo

Teniendo en cuenta las influencias que a lo largo de la historia han logrado conectar las diferentes categorías artísticas, hasta la actual tendencia hacia la desaparición de la tradicional clasificación en géneros o estilos, el presente trabajo busca aproximarse a las relaciones entre cine y pintura. Tras argumentar la vinculación entre la pintura y el lenguaje audiovisual a nivel global, nos centraremos en analizar las últimas propuestas del audiovisual gallego contemporáneo para precisar la influencia del contexto paisajístico en la mirada de los creadores y su relación con la estética pictórica. La pintura nos ha enseñado a mirar y a crear, ha construido nuestro imaginario actuando como documento histórico y modelo de aprendizaje estético. Por eso, el grado de parentesco entre la pintura y el cine es, a pesar de las diferencias que podamos encontrar a primera vista, de una intimidad sobresaliente. Más allá de la referencia iconográfica directa, destacan aquellas propuestas fílmicas que, ya sea por sus calidades técnicas o por su vinculación sensible, se relacionan con características propias de la pintura. La iluminación, la atmósfera, la gama cromática, la textura o la composición constituyen los principales elementos que llevan a advertir el origen pictórico de las imágenes. Por otro lado, la historia del arte, y la pintura en particular, ha ido orientando nuestros modelos de disfrute estético por medio de los recursos gráficos empleados. No resulta extraño, por tanto, encontrar en el nacimiento del término paisaje una filiación directa con la pintura, pues la palabra fue originada con el objetivo de denominar los fondos campestres representados en los cuadros. El avance estilístico y temático de las corrientes artísticas trajo consigo la consolidación del paisaje como género pictórico independiente, originando una impronta iconográfica que se prolongaría hasta nuestros días. Hay imágenes icónicas que, bien a fuerza de repetición o bien por suscitar un desplazamiento frente a modelos establecidos, componen e influencian nuestro imaginario visual. Estas dos cuestiones sientan las bases para investigar la huella paisajística y la presencia de una estética ligada a lo pictórico en el caso del audiovisual gallego contemporáneo. Muchos trabajos surgidos a la margen de la industria en Galicia en los últimos años presentan ciertas peculiaridades que los vinculan con las las artes plásticas. Desde perspectivas narrativas y formales heterogéneas, varios comparten una asimilación del paisaje que quiebra las reglas de representación convencionales y se abre la una mirada dilatada. Su relación con la pintura se materializa siguiendo una serie de principios estilísticos que buscan desviarse de un uso normalizado del aparato fílmico: sustituyen los patrones argumentales y estéticos habituales por nuevos mecanismos desde los que invocar el fuera de plano, desde los que descubrir la textura, lo espontáneo de la imperfección o los pequeños detalles, cromáticos y atmosféricos, que se ocultan en la imagen y solo se manifiestan tras una mirada pausada. Así, el paisaje gallego asoma como una constante en los creadores que nos ocupan, abordándolo desde múltiples estrategias que en muchas ocasiones coinciden plásticamente con los recursos pictóricos. Evidenciados claramente en algunos filmes (textura, tiempo, luz, relación iconográfica) y únicamente simulados en otros, estos vínculos motivan una relación que se origina en la historia de la pintura y cuyo peso en nuestro imaginario visual compone un importante bagaje previo que logra intervenir en nuestras estrategias creativas.